La Iglesia vive tiempos de auténtica renovación espiritual y pastoral. Un signo de los tiempos que
hace esto evidente es el llamado que nos ha hecho el Papa Francisco a recuperar en el Pueblo Santo de Dios un verdadero espíritu sinodal. En la familia, Iglesia doméstica, la Iglesia puede
contemplarse a sí misma para seguir su camino sinodal porque “las familias son iconos vivos de la
Trinidad, en ella la comunión de la Iglesia encuentra sus raíces más profundas: El Dios Trinidad es
comunión de amor, y la familia es su reflejo viviente”. Nos encontramos entonces con “la íntima
relación que hay entre la familia y la comunidad cristiana: la Iglesia es una familia espiritual, casa
de los que creen en Jesús y viven según sus enseñanzas, y la familia, una pequeña Iglesia doméstica, escuela de amor a Dios y al prójimo.
El Departamento de Pastoral y Convivencia Escolar, comparte este material para trabajar con niños.